Hoy os voy a contar la historia. Una de unas fotos de boda muy especiales. Esta historia comienza en Solares y acabo increíblemente en Londres.
Iván y María, estos son nuestros protagonistas, vinieron a verme hace bastante tiempo, más de un año antes de su gran día con la intención de que les hiciese sus fotos de boda. Son una pareja joven, con mucha ilusión por organizar un día que fuese realmente especial para todos sus invitados y para mí que sería el encargado de crear el recuerdo que les durará para siempre. El mismo día que me visitaron depositaron en mi la responsabilidad de ser el fotógrafo para su boda. Me contaron todo lo que tenían planeado y lo que estaban pensado hacer, donde se casaban, cual era su restaurante, cuantos invitados serían, que cosas eran muy importantes para ellos…
Me hicieron saber en todo momento que las fotos de boda era una parte muy importante, que necesitaban un recuerdo único, bonito y que perdurase para siempre.
El día de su boda fue magnifico, se dieron el si quiero en la ermita del Carmen en Camargo, Cantabria. En una emocionante ceremonia plagada de lloros de emoción por parte de nuestra pareja. Posteriormente nos desplazamos a Solares, más concretamente a los Guardeses, donde tuvo lugar tanto el cóctel como el convite. Fue allí donde a María le aguardaba una sorpresa, que digo una sorpresa ¡Un SORPRESON!, ya que su recién estrenado marido le hizo un regalo que jamás podrá olvidar, hacer parte de las fotos de boda en Londres, ciudad que nuestra novia siempre había querido visitar.
Tras una fantástica boda y su posterior viaje de novios la pareja y un servidor pusimos rumbo a la capital de Inglaterra, Londres nos espera y muchas historias y anécdotas nos aguardan en un viaje que sin duda no olvidaran ni ellos ni este fotógrafo de bodas.
La idea de hacer las fotos de boda en Londres fue de Iván, tres días antes de su boda quiso quedar conmigo para contarme algo, me pase todo el día pensando -«¿qué podrá ser que no me lo quiera contar por teléfono?». Cuando me contó la idea me pareció genial, ya que mi destino vacacional iba a ser esa misma ciudad sin saber que volvería en tan poco tiempo.
Aterrizamos en un hotel con encanto en el centro de la ciudad, donde enseguida la pareja se visito con las galas de boda para empezar a realizar parte del reportaje de fotos que teníamos pensado. Tuvimos el tipico clima londinense, lluvia, frío, viento… pero nada de esto nos hizo perder las ganas de trabajar y realizar dos sesiones intensas para sacar una colección de posados que compondrán su reportaje final.
El primer día empezamos haciendo fotos de boda de noche, ya un clásico en mis reportajes. El Big Ben, Tower Bridge, Millenium Bridge… todos los destinos turísticos y más característicos de una ciudad tan emblemático como es la capital de Inglaterra.
Realizar unas fotos de boda fuera de tu comunidad es increíble, pero poder salir a otro país y disfrutar de tu pasión con otros entornos y sitios espectaculares es aún mejor. Me doy cuenta de lo afortunado que soy teniendo parejas como ellos que quieren hacer cosas nuevas, diferentes y que cuentan conmigo para que sea su fotógrafo de boda.
Muchas gracias por todo, sois una pareja fantástica y me he sentido muy a gusto tanto con vosotros como con vuestros invitados. Desde aquí os deseo lo mejor y espero que seáis muy pero que muy felices.
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