Aún recuerdo aquel día en el que Carmen se pone en contacto conmigo para decirme que quiere que sea su fotógrafo de bodas. En un primer contacto vino ella sola, ya que le urgía poder hablar conmigo para conseguir que fuese yo quien retratase su boda, quien crease el recuerdo de su día, en definitiva ser su fotógrafo.
Carmen y Dani prepararon una boda preciosa en Escalante, un pueblo de Cantabria. Donde todos sus familiares y amigos iban a disfrutar de un día mágico y estupendo. Soy de esas personas que piensan que cuando preparas algo con tanto cariño todo puede y debe salir bien.
Tenemos mucha suerte de dedicarnos a esto, podemos retratar los momentos importantes en la vida de las personas. Carmen y Dani son una de esas parejas que te dejan huella, no solo por como ha sido su boda o lo que hemos disfrutado con ellos si no por como son, por la naturalidad que tienen y por el cariño con el que nos trataron desde el primer momento.
Disfrutamos muchísimo de su boda, un día lleno de emociones, momentos, lagrimas, felicidad… que nos va llenando las tarjetas de fotografías que sin duda serán únicas tanto para ellos como para nosotros. Ojalá tengamos muchas bodas como las de esta pareja, y muchas personas como ellos, que nos dan tantísima libertad a la hora de hacer las fotografías de su boda y poder crear los recuerdos que les quedarán para siempre.
Desde aquí os queremos dar las gracias y os deseamos lo mejor. ¡¡Sed muy felices!!
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